Resulta muy doloroso, ver día tras día, como en la ONCE la dignidad de muchos
dirigentes se devalúa, hasta llegar a alcanzar unos niveles ínfimos.
Parece increíble, que en el siglo XXI, los
trabajadores de esta institución, tengan que padecer y soportar toda clase de
amenazas, improperios, coacciones, etc., provenientes de personas, cuyo único
mérito para alcanzar un puesto de dirección, es llevar de manera visible entre
sus dientes, los carnets de afiliado a Unidad Progresista y a UTO – UGT.
Estos dirigentes digitales, que en cualquier otra
empresa, pública o privada, no serían mucho más que los “chicos de los cafés”,
en la ONCE son
encumbrados a Directores de Agencia, Jefes de Jefes o a Gestor Comercial (Que
en alguno de los casos, llegan a creer ser el mismísimo Billy el Niño),
Coordinadores de no se sabe qué, etc. Sin importar a los ejecutores de tan
arbitrarias decisiones, que en gran parte de los casos, los promovidos a tan
dignos cargos, no sepan ni cómo encender un ordenador. Interesándoles únicamente que sepan defender, por lo civil o
por lo criminal, sus oscuros intereses político/sindicales, utilizando para
ello todos y cada uno de los recursos de la institución.
Tal es el grado de desvergüenza, que en algunos
casos, a los trabajadores de nuevo ingreso, junto con su contrato de trabajo,
se les pasa a la firma, el alta en el sindicato de la empresa, se les recomienda
que trabajen en sus días de descanso, se les invita a ampliar el horario
laboral, se les aconseja que no se afilien o se den de baja de cualquier
sindicato que no sea el de la empresa, pues este gesto, “incrementará
considerablemente las posibilidades de futuras renovaciones”, –aunque en
realidad, lo único que tomarán en consideración, serán sus ventas- etc.
Pero si todo esto resulta bochornoso, más lo es ver
como uno de esos jefes digitales, creyéndose la mismísima Evita Perón y
enarbolando la bandera como la principal defensora de los derechos laborales,
intenta reclutar a las que ella denomina, “sus manos derechas”, para que
terminen haciéndoles de chivatas. Pero la realidad nos viene demostrando, que
esta falsa Evita, no pasa de ser una Barby de extrarradio.
O como ese otro jefecillo, que, ocupando el lugar
del tonto del pueblo, henchido por el momento de gloria que está gozando
actualmente, se pavonea delante del señorito y de la clac, luciendo la última
pieza que ha cobrado, aunque quizás en su ignorancia, no llegue ni tan siquiera
a saber, que a quien realmente le interesa la pieza como trofeo, es al señorito
y que éste, lo único que está haciendo, es lo que hacen todos los señoritos,
que no es más, que aprovecharse y reírse del tonto del pueblo.
Estas y otras lindezas, son algunas de las
inmoralidades con las que los trabajadores de la ONCE , tenemos que convivir a
diario.
Si tú eres uno de estos trabajadores represaliados o
acosados por el régimen dictatorial que impera en la ONCE , imponte, rebélate,
defiende tus derechos y demuéstrales que tu dignidad está muy por encima de la
de ellos. Somos trabajadores, no esclavos y tenemos nuestros derechos, no
permitas que nadie te los robe, si quieres que se respeten
tus derechos y los de todos los trabajadores de la ONCE.
El clima de miedo permanente que han inculcado los
directivos, tiene que desaparecer, pues ni la ONCE , ni los trabajadores les pertenecemos a
estos dictadorzuelos de tres al cuarto, quienes han tomado la institución al
asalto, adaptando todas las normas a sus inconfesables intereses, llegando a
creerse, que la ONCE
es su cortijo y los trabajadores somos el ganado de la finca.
si tienes inquietudes
sindicales y quieres que se te trate con dignidad y respeto, en CCOO tenemos un
sitio para ti.
A
nosotros no nos van a callar, ni a doblegar, porque para CCOO, lo primero son
los TRABAJADORES.
Sección Sindical
CCOO ONCE